Crisis: menos gastos y más impuestos en la agenda que el macrismo anunciará el 3/9

BUENOS AIRES (Agencias y diarios). Con el propósito de adelantar las perspectivas fiscales y alcanzar el déficit 0 en 2019, el gobierno del presidente Mauricio Macri anunciará el lunes un paquete de medidas que apuntará a reducir el gasto y aumentar los impuestos.

La idea mantuvo Macri y sus colaboradores encerrados en la Quinta de Olivos, donde las cuestiones económicas, financieras y sociales fueron repasados a la luz de la agitación provocada por la extraordinaria suba del dólar que hoy cerró en 38 pesos tras superar ayer los 41.

Al final, entre lo poco que trascendió se supo que las expectativas están centradas en que el año próximo empiece con un rojo de 0,5 por ciento, redoblándose la puesta con respecto al 1,3 por ciento previsto originalmente y que representaba un recorte de 300 mil millones de pesos.

A partir de ello, y como exige el FMI para acelerar los desembolsos previstos para 2020 y 2021 al año que viene, Argentina obtendría 29.000 millones de dólares para cubrir todas las necesidades de financiamiento.

En forma puntual, algunos medios centraron la revisión en la reducción de los subsidios,  disminución de la obra pública y menores gastos en la estructura política, tal como se había anunciado tiempo atrás, pero con una serie de reformulaciones.

También se mencionó la aplicación de mayores recortes en el Estado, con un pedido de esfuerzo extra a las provincias y los municipios, y aunque no hubo decisiones con relación a la reducción de la cantidad de ministerios, algunos organismos de segunda línea serían suprimidos.

Con respecto al nivel de los impuestos, el caso de las retenciones volverá al tapete ya que el cronograma de reducción que se había retomado en 2018, inclinaría la balanza hacia la aplicación de este gravamen a las exportaciones sojeras, alentado por el fuerte aumento del tipo de cambio.

Además, estaría en consideración un aumento en la alícuota de Bienes Personales, que bajó hasta 0,25 por ciento, a pedido del peronismo, volviendo al 1 por ciento pero sobre los activos en el exterior, exclusivamente, como inmuebles o cuentas.

Es probable también que se frene la baja de impuestos prevista en la reforma tributaria, junto al pacto fiscal firmado con las provincias. Así, se pondría en un impasse la disminución de Ingresos Brutos y Sellos, principales fuentes de recaudación para las provincias.

Por otra parte, quedaría por resolver la reducción de la carga de aportes patronales, que también tenían un cronograma de reducción gradual para las empresas, a través de un aumento del mínimo no imponible.

Otras medidas para mejorar los ingresos se refieren al recorte de un 66 por ciento de reintegro que reciben las exportaciones industriales y frenar la baja de retenciones a los derivados de la soja (aceite y harina).

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