LA VOZ DE LA GENTE
La persiguió e ingresó a su edificio en el barrio El Palomar de Posadas
En las redes sociales, una joven mostró los videos de seguridad que retratan el momento. Sostuvo que, al momento de hacer la denuncia, los policías realizaron “comentarios inapropiados”.
Una joven de Posadas expuso en su cuenta de Instagram el acoso que vivió de parte de un hombre que la siguió hasta su casa.
Los hechos sucedieron el pasado viernes en horas de la tardecita, cuando la muchacha volvía a su domicilio del barrio El Palomar.
“No me queda más que recurrir a este medio, ya que como sabemos estas situaciones suelen quedar en la nada”, comenzó relatando en su posteo la joven, con el fin de alertar a otras mujeres.
En este sentido, enfatizó: “Para que nos cuidemos entre todas”, y acompañó su testimonio con tres videos de las cámaras de seguridad de su edificio para ratificar sus dichos.
En las grabaciones, se pude notar cómo un hombre viene caminado detrás de la joven, quien adujo: “Me seguía”, a lo cual añadió: “Decide arrinconarme en la puerta de entrada de mi edificio, asegurándome que iba entrar conmigo”.
De acuerdo al relato de la denunciante, luego de que se detuvo para ingresar a su vivienda, el sujeto continuó unos pasos más, volvió y se paró detrás de ella. En las imágenes, se observa cómo la joven le cede el paso y duda si ingresar o no, a lo que decide salir y aguardar afuera.
Ya dentro del hall de la residencia, el sujeto da vueltas con su celular frente al ascensor y usa su teléfono presuntamente con el fin de disimular, tras lo cual se retira.
“Decido salir a la vereda nuevamente y agarrar el celular, ante lo cual el reacciona muy confundido y finalmente decide salir”, refirió la damnificada.
Luego del mal momento que vivió, se acercó a la comisaría a realizar la denuncia correspondiente acompañada de sus amigas, ante lo cual afirmó recibir comentarios inapropiados por parte del personal policial.
“Todo fue plasmado en una exposición policial, donde al momento de recurrir a la comisaría también mis amigas y yo recibimos comentarios inapropiados por parte del personal policial (lo cual me hace pensar realmente ¿quién nos cuida?)”, cuestionó la muchacha.
Para concluir su testimonio, hizo hincapié en una situación por la cual atraviesan muchas mujeres todos los días: “No nos queda otra que rogar tener suerte y poder llegar siempre a salvo a nuestro destino, porque esto nos toca. No es el horario, ni tampoco la ropa, son estos enfermos con los que tenemos que convivir. No nos queda otra que estar alertas, siempre. Cuídense, cuidémonos”.
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