LA REGIÓN
La Justicia investigará el presunto uso ilegal de WhatsApp en la campaña de Bolsonaro
BRASIL. La justicia electoral brasileña resolvió abrir una investigación sobre las denuncias de que empresarios habrían comprado servicios de bombardeo masivo de noticias falsas por Whatsapp para beneficiar al ultraderechista Jair Bolsonaro en la campaña presidencial.
El Partido de los Trabajadores del candidato de izquierda Fernando Haddad, había pedido al Tribunal Superior Electoral (TSE) en Brasilia “agilizar los plazos” para procesar su recurso interpuesto para pedir la investigación. La demanda se realizó tras la información publicada la semana pasada por el diario “Folha de São Paulo”, en la que se señala que varias empresas, que tienen prohibido por ley realizar donaciones a candidatos, habrían aportado dinero en forma irregular para comprar “paquetes” de noticias falsas con el objetivo de que fueran difundidas por Whatsapp y beneficiar así a Bolsonaro antes de que éste ganara la primera vuelta del 7 de octubre con una ventaja mucho mayor a la prevista por los sondeos. El juez Jorge Mussi dio un plazo de cinco días a los implicados para presentar su defensa.
En esa línea, WhatsApp tomó un lugar protagónico en el fin de semana en la campaña presidencial brasileña, ya que confirmó el bloqueo de cientos de miles de cuentas, entre las que se encuentra una usada por un hijo del candidato ultraderechista Jair Bolsonaro. Esto fue por la gran cantidad de grupos y listas de difusión que han bombardeado sin tregua con mensajes a millones de brasileños, sometidos ya de por sí a la campaña más polarizada de su historia.
Según un portavoz de la aplicación de mensajería instantánea, centenares de miles de cuentas fueron cerradas en el período electoral, gracias a una tecnología “punta” que identifica “cuentas con comportamiento anormal”. Por otro lado, el hijo del candidato presidencial de extrema derecha, el senador electo Flavio Bolsonaro, reveló que había sido bloqueado para utilizar el servicio, exigiendo una explicación de parte de la compañía. “No hay límite para la persecución“, escribió el senador a través de Twitter, agregando que la prohibición luego había sido levantada.
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