¿Y la mística? El Brujo Manuel al lado de Holan en la victoria de Independiente

En la casa del Diablo apareció un brujo. Manuel, el hombre de Gorina que saltó al estrellato por acompañar a la Selección en el partido decisivo para la clasificación al Mundial, estuvo este martes en el Libertadores de América y presenció el pase de Independiente a la final de la Sudamericana. No es la primera vez que el brujo aparece cerca del plantel de Ariel Holan y ya se convirtió en un amuleto.

Del mismo modo que lo había hecho el domingo en el encuentro que Estudiantes le ganó sobre la hora a Atlético Tucumán, Manuel miró el partido parado en el campo de juego, cerca del banco de suplentes local y con una pechera oficial. En este caso una naranja que indicaba que era parte del staff.

Acompañado por un auxiliar del cuerpo técnico del Rojo, Manuel fue retratado por las imágenes televisivas sobre el final del choque que ganó el local 3-1 ante Libertad de Paraguay y que lo lleva a la final de la Copa Sudamericana.

El Brujo ya había sido invitado y viajó a Asunción para el choque de ida. Según trascendió, el nexo entre el club y este hombre de 57 años que “ayuda a la gente” es Damián Albil, el tercer arquero del plantel, y ex hombre de Estudiantes.

Allí, donde salió campeón de la Copa Libertadores 2009 y estuvo a punto de vencer a Barcelona en la final del Mundial de Clubes, Albil conoció a Manuel. Es que el brujo por ese entonces ya era una fija tanto en los entrenamientos del Pincha en City Bell como en los partidos de Copa y campeonato.

Un brujo en la casa del Diablo: Manuel estuvo en el gran triunfo de Independiente
El Brujo Manuel, en el triunfo de Estudiantes ante Atlético Tucumán el domingo.

Ahora el brujo extendió su “trabajo”. Hasta que dio el salto a la Selección parecía propiedad exclusiva de Estudiantes en el fútbol. Pero ojo, también acompañó a Temperley en el cierre del torneo pasado cuando el Cele debía salvarse del descenso y Matías Sánchez, otro ex Estudiantes, acudió a sus servicios.

Manuel nació en Tucumán hace 57 años y dice que desde los ocho se dedica a ayudar a la gente. Atiende hace más de 20 años en un rancho de la localidad de Gorina, en las afueras de La Plata.

Hasta allí llegan cuatro veces por semana cientos de personas a tratar de conseguir un paliativo a sus problemas de salud, sentimentales, de trabajo… Hasta ahora se movía por las sombras: ya había “atendido” a Ricardo Fort, a Eduardo Duhalde y a Juan Sebastián Verón, entre otros, pero siempre esquivando la masividad.

Hasta que el viaje a Quito para acompañar a la Selección en el último partido de Eliminatorias lo catapultó. El experimento salió bien y hasta recibió elogios del presidente de la AFA, Claudio Tapia.

Tiempo después, ya con la clasificación a Rusia abrochada, hasta Messi habló del brujo. “Me enteré que había ido, sabía que estaba ahí. Si ayudó, bienvenido sea…”.

Ahora también es bienvenido en Independiente. Sí, justo en la casa del Diablo.

Clarín

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