En la noche del Sábado 24 cuando se festejaba la Navidad en San José, Apóstoles, tres hermanos fueron a disfrutar de un festival navideño en el centro de la ciudad, cuando Erica Detrich, una joven de 18 en compañia de sus hermanos de 20 y 14 acompañaron a una amiga hasta la entrada de San José, puntualmente  donde entran los colectivos; en aquel momento fueron interceptados por un policía llamado Gustavo Valenzuela. El efectivo policial al ver a uno de los hermanos de Erica, bajó del móvil policial, y comenzó a increpar al joven de 20; entre gritos y amenazas, rompió una botella y atacó a los hermanos Detrich. Erica cuenta a La Voz de Misiones, que particularmente a ella, la golpeó con una piña en el pecho. Frente a la violenta y confusa situación el policía se comunicó con su padre retirado de la fuerza, José Valenzuela, que al llegar al lugar, enfrentó a los golpes al hermano de 14 años de la denunciante. Lo recién descripto fue relatado por Erica a La Voz de Misiones y ocurrió a las 3 de la madrugada del Domingo 25 en pleno centro de San José.
Posteriormente, los hermanos Detrich escaparon y se fueron a su casa, donde se dispusieron a dormir. Pasadas las seis de la mañana, el policía acompañado de su padre no solamente entró a los tiros en la casa de una vecina de Erica, llamada Gabriela Monte (39) que entrevistada por el portal posadeño El Territorio manifestó el calvario que vivió con sus hijos, cuando el mismo policía descontrolado ingresó violentamente a la vivienda de Monte en el barrio Malvinas de San José, amenazó de muerte a los hijos de la mujer e incluso habría efectuado varios disparos con un arma de fuego.

Gabriela Morel (39), relató a El Territorio que “nosotros estábamos durmiendo y nos levantamos cuando escuchamos los ruidos y gritos. El hombre estaba en la calle, primero no le reconocimos, luego nos dimos cuenta que era un policía que vive acá”. Según expresó la mujer, a esa hora un hijo suyo de 16 años se encontraba en la vereda de su casa junto a un compañero, cuando el acusado llegó con su vehículo y habría confundido a los adolescentes con unos vecinos (los Detrich) con los cuales mantiene una disputa de vieja data.

Denuncia realizada en la Jefatura de Posadas.

El cabo de la Policía Provincial que cumpliría funciones en la Comisaría Quinta de Garupá, estaba acompañado por su padre y ambos evidenciaban signos de estado de ebriedad cuando entró en la vivienda de Gabriela, y posteriormente, luego del bochornoso incidente, fue en busca de los hermanos Detrich a cuadras de la casa mencionada.

Al llegar a la vivienda de la familia Detrich, como se puede ver en el video que nos compartió nuestra entrevistada, se visualiza un poco de lo sucedido, “vino acá y empezó a romper el cerco, después dio un portazo, rompió todo” comentaba la joven denunciante a La Voz de Misiones. “Nosotros no podemos ni salir a la esquina por que estamos amenazados de muerte” asegura Detrich, quien expresa que “nos amagan con la camioneta que nos van a chocar”. El video fue filmado por la madre de la denunciante quien manifiesta que el joven policía gritaba a la señora que filmara antes de apuntarle con la pistola y disparar, bala que no logró su objetivo gracias a que el padre de Erica empujó a su señora al piso.

“Esto viene desde el 2010 pero nunca pasó a mayores pero esta vez pasó a mayores”, indica Erica quien explica los motivos por los cuales sospecha que el policía le guarda rencor a la familia. En el 2010 la Policía comunicó al padre de la joven de San José que era sospechoso por disturbios en la vía pública, “lo llamaron y le dijeron que el estaba haciendo disturbios siendo que el no estaba y era el 15 de la vecina”. Continúa diciendo que “cuando el fue allá, lo cagaron a palos dentro de la Comisaría”.

A raíz de la violencia policial sufrida por esta familia, Erica Detrich realizó una denuncia en la Jefatura de Posadas por el miedo y la conspiración policial que viven en San José ante este policía violento que ataca a su familia. Erica declara que con su denuncia logró que se detuviera a Valenzuela pero que este fue liberado por un familiar juez del cabo que se desempeña en Apóstoles.

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