Con el escándalo del escrutinio de la edición 2016 de la Estudiantina Apes y su gestión quedó en la mira de toda la comunidad posadeña, además del estudiantado participante de este año. De la Asociación Posadeña de Estudiantes Secundarios se ve a la comisión directiva que son los que hablan en los medios y por lo tanto los más visibles. Pero existen otras comisiones, conformadas por ex alumnos, profesores, padres, etc. que también tienen voz y voto en la fiesta de los adolescentes posadeños.

En teoría la comisión directiva es integrada por estudiantes que son electos por el voto de los demás alumnos de todos los colegios. Esa comisión directiva debe aceptar y reconocer a otra comisión fiscalizadora que la integran profesores asesores de cada establecimiento y padres. Los nombres son los que envían y designan cada institución. Es un representante por cada colegio y son 29 colegios en total, aunque al escrutinio solo llegan 21 colegios porque deben participar quienes presentan todos los rubros y no solo rey y reina.

A su vez, esa comisión crea otra de inspecciones que se encarga de recorrer ensayos, y evaluar la conducta de los chicos y de cada colegio. Si se detecta una falta, por ejemplo una pelea entre escuelas, los asesores labran un acta que va a la comisión de fiscalización que envía el acta al Tribunal de Disciplina conformado por dos abogados y un escribano que analizan la inconducta que puede derivar en la quita de puntos de ese establecimiento, lo que lo perjudica en el conteo final.

Los integrantes de la comisión directiva son seis, los integrantes de la comisión fiscalizadora son 21 adultos, los de la comisión de inspección son más de diez, y los integrantes del Tribunal de Disciplina son tres. Es decir, la Asociación está conformada por más de 40 personas.

Por otro lado el jurado de la Estudiantina debe estar conformado por bailarines, músicos, artistas, egresados con una antigüedad de cinco años como mínimo fuera de la escuela, que conozcan de los rubros que participan, que son nueve en total. Para que la fiesta comience, en cada palco debe haber entre seis y nueve jurados. Si hay cinco se demora el inicio hasta que se complete el número, como suele ocurrir. Para la selección de esos jurados, los asesores de cada establecimiento educativo (uno por cada colegio más un suplente) proponen una lista. Posteriormente la comisión fiscalizadora evalúa la lista y luego por voto secreto la comisión directiva decide.

En las noches de calle los integrantes del jurado deben colocar el puntaje que le corresponde a su rubro en un volante. Hay uno original y una copia. El original una vez emitido el puntaje se coloca en un sobre cerrado y va a una urna que lleva la firma de cinco asesores por noche. Esos asesores representan a un colegio cada uno y se toma como referencia a los cinco colegios que pasan primero una noche o a los cinco últimos. La copia de ese voto se entrega al asesor de cada colegio que el día del escrutinio tiene que presentarlo para cotejar que coincidan esos votos.

Cuando llega el día del escrutinio, se efectúa por lo general en la escuela de Cadetes de la Policía. Las urnas las debe custodiar la Policía pero este año no pudieron hacerlo y quedaron bajo resguardo de la presidenta de la Comisión Fiscalizadora, Ida Edelmina Gimenez, quien renunció la noche anterior al escrutinio y asumió la vice.

Dentro del cuarto del escrutinio hay alrededor de 180 personas. Todos los integrantes de las comisiones más siete personas por colegio, 21 instituciones en total. Esas siete personas son los representantes legales, los directores de cada rubro con sus asesores y los suplentes. Cada mesa tiene su categoría y contiene un acta donde se anotan los resultados y se vuelcan al libro de acta oficial de la comisión fiscalizadora.

En el último y polémico escrutinio ocurrió que los asesores de los colegios que tienen que firmar las urnas no reconocieron sus firmas. Es más, en la urna 2 que se anuló, había firmas en papeles que estaban pegados a esa urna. Ellos aseguraron que firmaron la urna, no un papel adherido. Por eso se anularon y pese a lo cual siguió por votación el conteo, con los resultados, o la falta en parte de ellos. Ese resultado llevó a que el Instituto Janssen gane el podio de la categoría A de banda de música de la Estudiantina. Pero por las irregularidades, en la categoría principal están congelados y en duda.

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Alrededor de las 3:50 de la madrugada de este Miércoles vándalos aún no identificados por la Policía atacaron con una bomba tipo “molotov” las instalaciones del Instituto Politécnico San Arnoldo Janssen de Posadas. El explosivo solamente dañó una puerta y no causó más perjuicio por la intervención de los agentes policiales.

Según se estableció, momentos antes, personas desconocidas arrojaron un artefacto explosivo de fabricación casera en el establecimiento ubicado en Santa Catalina e Ituzaingó y luego se dieron a la fuga.

Personal especializado de la Policía Científica realizaron las pericias correspondientes, no registrándose personas lesionadas. La Seccional 17º lleva adelante las actuaciones sumariales del caso.

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Los resultados de la edición 2016 de la Estudiantina posadeña fueron puestos ayer por parte de la Asociación Posadeña de Estudiantes Secundarios (Apes) en manos del Ministerio de Educación, tras los duros cuestionamientos que comenzaron después de darse los resultados el viernes pasado. Durante el fin de semana informamos desde La Voz de Misiones el conflicto que se desató desde el estudiantado posadeño participante de la histórica estudiantina que este año pone en tela de juicio la transparencia de las votaciones y en sí a la mismisima gestión de Apes.

Desde la Asociación, explicó la presidenta de Apes, Florencia Insaurralde, los colegios tendrán un plazo de tres días para presentar por escrito sus cuestionamientos. Ayer por la tarde mantuvieron una reunión con las autoridades educativas en la que entregaron toda la documentación del escrutinio. “Eso es lo que se busca, que los 21 colegios que participan en los diferentes rubros expresen su opinión y se llegue a una decisión en conjunto”, sostuvo.

El escrutinio dio por ganador en la categoría de banda de música al colegio San Arnoldo Janssen, y es justamente este podio el que es duramente cuestionado por los demás colegios.

Frente a todo, ayer el reclamo estudiantil se unificó en la plaza 9 de Julio que se llenó de estudiantes del Roque González, Santa María, Comercio 6, Virgen de Itatí, Normal Mixta, Epet 2 y el Nacional, entre otros. Los adolescentes se manifestaron tocando los bombos, chanchas y replicando las coreografías que desplegaron en las cuatro noches de Estudiantina. La convocatoria fue hecha a través de los grupos de WhatsApp como publicamos ayer.

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