Rumores de tercerización del servicio de cobro de estacionamientos medidos en el centro de Posadas provoca un centenar de cuestionamientos, dudas y preocupación por parte de los tarjeteros posadeños. La comuna evalúa la implementación de un sistema electrónico de cobro para el estacionamiento medido, lo que según temen los empleados, se traduciría en despidos. En la capital misionera hay unos 150 tarjeteros y muchos tienen entre 20 y 30 años de antigüedad. Son personas que perderían su única fuente de trabajo.

Sin confirmación oficial hasta ahora solamente hay suposiciones sobre el desenlace de esta cuestión. Por ello, desde La Voz de Misiones entrevistamos a dos tarjeteras posadeñas que quisieron preservar su identidad por temor a represalías de sus superiores ante tanta incertidumbre laboral. Las jóvenes madres explicaban que a las 4 de la mañana se realizan los cotidianos sorteos donde se define el sitio de trabajo de la jornada, una vez obtenida esta información ocupan su puesto en esa zona hasta el mediodía. Trabajan de Lunes a Sábado y con este trabajo mantienen a sus familias.

Tanto Ana V. como Daniela G. indicaron al diario que hace un mes que se les advirtió sobre la perdida de sus puestos laborales actuales, “nos dijeron que se iba a privatizar eso”. Ambas creen que la situación es crítica y muy real, y que se efectivizaría en cualquier momento, “va a pasar” aseguraron. Con respecto a cual es la situación que se vive en la Municipalidad, indican que cuando están ahí tienen que lidiar con la burocracia “muchas firmas, muchos papeles, nos preguntan de todo”. Ahora los tarjeteros deben definir que acción lleva ante tal trágica realidad que les toca vivir ya que no se sabe a ciencia cierta que ocurrirá cuando se implementen los cambios previstos. Mientras tanto tienen promesas de re-ubicación en nuevos sectores o de salarios seguros sin tener definido que tareas realizarían.

Las tarjetas de estacionamiento medido en la ciudad de Posadas tienen un valor de 12 pesos, por día cada tarjetero recauda hasta 450 pesos, monto del cual percibe el 70 por ciento de ganancias mientras que el otro 30 por ciento pertenece a la comuna. El mínimo de tarjetas que deben comprar para salir a trabajar son 50 que deben ser vendidas en la cuadra que se le asigna a cada uno.

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